Como un espacio simbólico, el concurso de arte joven malaYerba surgió dentro de la plataforma Fondo de Arte Joven para hacer valer los discursos de los nuevos artistas visuales cubanos, con sus lenguajes diversos de creación.
Nació parafraseando un texto del curador y crítico de arte Gerardo Mosquera, en un contexto similar de inspiración, con un enorme desafío: cosechar la malaYerba como hecho artístico.
A decir de la curadora de arte e investigadora Corina Matamoros, el hecho artístico no se produce solo, sino en un circuito donde intervienen un conjunto de expertos y especialistas que hacen mover el hecho artístico en sí, y en este caso, la malaYerba.
Este 24 de enero, fruto de un esfuerzo colectivo por convertir utopías en arte, se presentó en la Sala Teatro del Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana, el catálogo a la primera edición del certamen, que llegó para quedarse como un laboratorio de creación joven, con una selección sólida de artistas que viven y trabajan en Cuba.
Veintitrés finalistas componen el volumen, que contiene sus miradas particulares -y colectivas- sobre la migración, prejuicios sociales, libertades por conquistar, cual manifiesto generacional que marca también la existencia de este proyecto, nacido en Cuba, en este tiempo.
De acuerdo con Esterio Segura, artista visual y jurado de esta primera edición, “de aquella semilla de malayerba, plantada por Gerardo Mosquera como concepto sobre lo cubano, más que el arte en sí mismo, surge hoy este espacio que evidencia el trabajo de artistas jóvenes, su capacidad de investigación y creación”.
El material, cuidadosamente diseñado por el equipo de Consense Studio, con edición de Sheyla Valladares e impresión de la editorial española Selvi Artes Gráficas, compila la obra de jóvenes creadores, como herramienta indispensable para documentar, desarrollar y promover su trabajo a escala internacional.
El catálogo constituye también un elemento bibliográfico indispensable en la formación profesional que el Fondo de Arte Joven y la Fundación Los Carbonell / NG Art Gallery ponen a disposición de bibliotecas públicas, centros de estudio y profesionales de las artes.