por: Mercedes Muñoz
En fecha cercana al centenario de Servando Cabrera Moreno (La Habana, 1923-1981) se inauguró la exposición colectiva Paisaje para el próximo siglo, que como título coincide con una obra realizada por Servando en 1975 y como estandarte de esta muestra expresa el diálogo entre dos períodos del arte cubano con un siglo de por medio, pero que recuerdan cierta teoría cíclica de la historia.
Siempre fascinante, la trayectoria de Servando Cabrera tiene actualidad y un impacto notable, del cual él no llegó a ser del todo consciente. La exposición Paisaje para el próximo siglo es una forma de honrar ese legado a partir de la obra de artistas jóvenes en distintos momentos de sus carreras que hoy pueden declararlo como referente o eligen homenajearle haciendo, a su vez, su propia contribución al arte cubano.
Sin dudas, se trata de una oportunidad excelente para apreciar la diversidad y la creatividad de la escena de las artes visuales en Cuba. De ahí que tenga tanto valor inaugurar la muestra en el Salón Blanco del Convento de San Francisco de Asís, un nuevo espacio de exposición activado por el Fondo de Arte Joven (FAJ) gracias a la cooperación entre la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE), la Fundación Los Carbonell –poseedores de la más importante y extensa colección privada de obras y documentos de Servando– y la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH), entre otros colaboradores.
La exposición reúne el trabajo de una de artistas jóvenes y algunos más establecidos, todos los cuales han sido inspirados de alguna manera por la obra y la visión de Cabrera Moreno. La selección de piezas abarca una amplia gama de estilos y perspectivas. Se percibe una visión propia en torno a Servando en las obras de Niels Reyes, Jorge Otero, William Acosta, Lancelot Alonso, Daniel R. Collazo, Yohy Suárez, Daniel Arévalo, Gabriel Cisneros, Luis Miguel Rivero, Omar Tirado, José Ángel Nazabal, Mario E. Briño y Lauren Mederos.
Pasando por piezas de gran formato, esculturas y videoinstalaciones que desafían las expectativas, la exposición ofrece una propuesta rica y diversa de la creación joven. Se realza con la curaduría de Sandra García Herrera y Neida Peñalver, el montaje del Equipo técnico de NG Art Gallery y las palabras de Rigoberto Otaño, que acompaña la presentación de la muestra.
En general, se nota un alto nivel de calidad y ofrece nuevas miradas. Entre los artistas expuestos se incluyen, de hecho, beneficiarios del Primer Programa de Convocatorias FAJ 2023 como Gabriel Cisneros y Mario E. Briño, así como otros que repiten la experiencia de exponer junto al FAJ, tras haber formado parte de la anterior muestra Hijos de Darwin.
En términos de presentación, el Salón Blanco del Convento de San Francisco es un espacio amplio y luminoso, que permite una visión clara y despejada de las obras expuestas. La iluminación es cuidada y precisa, lo que permite apreciar los detalles de cada pieza, y la disposición de las obras en la sala crea una sensación de fluidez y continuidad.
La resonancia con la obra de Servando Cabrera da unidad a esta exposición. Los artistas convocados transitan por los temas que marcaron la vida y la obra de Servando. Desde la exploración del cuerpo humano y su erotismo -la poética visual por la que hoy se reconoce al creador de Milicias campesinas y Homenaje a la soledad-, hasta la arquitectura y el coleccionismo, entre las grandes obsesiones de Servando. Todas las piezas lanzan un guiño a la impronta de aquel creador, incomprendido en su tiempo.
Una frase dicha por Cabrera Moreno en entrevista ofrecida a la Revista Bohemia en 1975 recibe a los espectadores de la exposición, pues en ella ofrece un consejo a los artistas cubanos. De forma que se añade una capa de profundidad a la exposición y también se muestra cómo el legado de Cabrera Moreno sigue siendo relevante y significativo para los artistas de hoy en día.
En este sentido, la exposición no solo es una celebración del pasado, sino también una reflexión sobre el presente y el futuro del arte cubano. Al mostrar el trabajo de artistas jóvenes cubanos, la exposición demuestra la vitalidad de la escena artística cubana actual que requiere mayor apoyo con propuestas como las del FAJ. Al mismo tiempo, la presencia constante de la figura de Cabrera Moreno nos recuerda la importancia de la tradición y la historia en la construcción de una cultura viva y dinámica.
En resumen, la exposición «Paisaje para el próximo siglo» es una muestra emocionante del arte cubano contemporáneo y de la influencia duradera de Servando Cabrera Moreno en la cultura del país. La selección de obras ofrece una amplia gama de enfoques y perspectivas, lo que la convierte en una experiencia estimulante e inspiradora para el espectador que estará disponible hasta septiembre de 2023.
Foto de portada: Helman Bejerano